PEDAZO DE UN RECUERDO

Pálidos seres deambulando a merced de su instinto poético,

mendigando con una sutil y vana súplica, hacia el cielo nocturno,

por un trozo de inmensidad.

Asi me veo… ahora solo quedan en silencio los pequeños recuerdos,

que jugaban a ser niños invisibles, ahogados, con su rostro eterno de pequeñas risas,

y su juego de insensibles formas,

allí quedaron en mi prisión lunar, acorralados, bajo el yugo de un universo silente...mi universo.